Fusión de la marca icónica de KFC con una comodidad inigualable

La mayoría de los restaurantes de comida rápida tratan sus sitios web como momentos puramente transaccionales, asumiendo que los consumidores ya están preparados y listos para pedir.

Durante años, KFC no fue diferente.

Dejaban que los servicios de entrega de terceros gestionaran la mayoría de los pedidos online, mientras que ellos daban prioridad a las experiencias en persona para reforzar su marca.

Pero las expectativas de los consumidores cambiaron rápidamente. Exigen más comodidad y personalización que nunca, y esperan que las marcas satisfagan -y superen- sus necesidades en línea y sobre la marcha. Con estimaciones de que los restaurantes de servicio rápido serán un 54% digitales en 2025, KFC necesitaba una agencia que le ayudara a llevar su hospitalidad sureña a la era digital.

Nos encargaron que creáramos una experiencia de cliente líder en el sector, tanto en persona como online, que encarnara la personalidad cálida e irreverente de su marca y que, al mismo tiempo, les situara por delante de sus competidores de comida rápida.

Desde innovadoras experiencias de autoservicio hasta un sitio web y una aplicación móvil completamente renovados, nuestro objetivo era ayudar a KFC a vender más pollo para chuparse los dedos fusionando el encanto del Coronel con la velocidad que ansían los consumidores modernos. Nos basamos en la investigación de los consumidores para renovar todo el enfoque digital de la marca.

Esto supuso desarrollar nuevas estrategias para la arquitectura y la fotografía de sus menús, elevar su marca con textos en la voz única del coronel y ofrecer apoyo creativo y tecnológico para su nueva experiencia, la mejor de su clase.

También creamos un sistema de diseño dinámico para una plataforma preparada para el futuro que pudiera ampliar su marca de forma coherente en todos los canales.

Una experiencia web cómoda y divertida

Gracias a la personalización basada en la información, creamos una experiencia online y móvil que no solo era más cómoda, sino también más divertida. Añadimos una personalización que permitía a los clientes volver a pedir sus productos favoritos una y otra vez, junto con una herramienta de recomendación para inspirar nuevos antojos basados en compras y comportamientos anteriores.

Una aplicación que conecta las experiencias online y en persona

Desarrollamos la aplicación móvil de KFC desde cero, creando una mayor conectividad entre las experiencias en línea y en persona.

Entre las nuevas funciones se incluyen las barras de progreso, que ayudan a los consumidores a seguir el estado de sus pedidos, y la emisión digital de tickets, que permite recogerlos y pasar por el mostrador sin problemas.

Diseño escalable

Aprovechamos la fuerte identidad visual de la marca para crear un sistema de diseño escalable con la personalidad de KFC impregnada en cada elemento, desde la tipografía hasta la sensación americana general.

También utilizamos el icónico rojo de la marca en momentos de buen gusto que animaron la experiencia, como las CTA clave, y aumentamos la exquisitez con primeros planos de sabrosos alimentos para inspirar el antojo y fomentar el descubrimiento.

Nuestra colaboración impulsó el crecimiento a gran escala de KFC en Estados Unidos. Al diseñar una experiencia más fluida online y en el autoservicio y la recogida, contribuimos a un crecimiento del 13% en las ventas en el mismo establecimiento en un periodo de dos años (2019-2021).

Mientras tanto, al reimaginar la experiencia del sitio web y la app de KFC contribuimos a un crecimiento significativo de las ventas digitales, al tiempo que llevamos la inconfundible personalidad de la marca y la voz del Coronel a nuevos territorios digitales.

El equipo también recibió el premio Yum! STAR Award por sus experiencias digitales innovadoras.